Cuidados para las hortalizas del huerto. Duchar las plantas?

Esta es una actividad que si se realiza adecuadamente beneficiara a nuestro huerto de hortalizas.

Está muy difundida la idea de que la parte aérea de las hortalizas no deben mojarse porque esto hace daño a la planta, “arroyando” las hojas.
Es cierto que si rociamos las hojas de cualquier hortaliza en pleno día, y si además el Sol pega fuerte, le hacemos daño. De la misma manera que una lluvia de verano en pleno día. Porque a continuación se calientan las hojas con la radiación solar. Y ya sabemos que calor y humedad juntos, son las condiciones idóneas para el desarrollo de hongos. Es importante evitar que en nuestros cultivos se desarrollen hongos, ya que en ocasiones puede ser de alto riesgo para el cultivo, afectándolo parcial o completamente.

Nuestro cultivo de Hortalizas no solo puede ser atacado por hongos, sino por diferentes fitopatogenos que también son favorecidos por la humedad.
Esto es así. Pero… ¿y si al atardecer mojamos intensamente las plantas rociándolas con agua a presión?, (cuando ya los rayos solares no inciden sobre las hojas). Esto ya es otra cosa…
Si esta ducha se realiza sobre las plantas mas propensas  a plagas, como son tomates, pimientos, berenjenas, pepinos… y lo hacemos de la forma indicada, será bueno para la planta, porque de esta forma “arrastramos” todo “bicho viviente” posado en hojas, tallos y troncos. Arrastramos huevos, larvas, orugas y todo tipo de insectos, muchos de ellos se ahogan.

Hay que tener cuidado con la presión con la que sean rociadas las plantas, ya que en ciertas etapas del desarrollo de las mismas se les podría provocar algún tipo de estrés y perjudicando nuestro cultivo.
Es evidente que un “lavado” a las plantas debe ser beneficioso. Pero cuidado, que no le irradie el Sol a continuación. Muy importante aplicar esta ducha al atardecer.